El padre Pérez regresó esta semana a Asturias y se incorporó el pasado viernes a su despacho de la sede ovetense de Padrinos Asturianos.
Tras más de dos meses de trabajo en Cali, donde supervisó los planes educativos de los niños que la institución tiene apadrinados en el Valle del Cauca y exigió a los responsables de los centros de formación el máximo rigor en sus funciones de seguimiento a los menores, el fundador afronta un trimestre lleno de intensas actividades.
Además de impulsar las tareas de captación de nuevos apadrinamientos, que se intensificarán significativamente en el curso de los próximos 90 días, el padre Pérez comparecerá en rueda de prensa, a mediados de abril, para dar a conocer un magno concierto solidario que se celebrará en el Teatro Campoamor de la capital asturiana el próximo mes de junio y participará en la celebración del Día de Padrinos Asturianos, jornada de confraternización prevista para el día 10 del mismo mes.
Bienvenido a casa, pues, páter Pepe.
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