domingo, 25 de abril de 2010

Colombia se une al dolor de la familia Murias

Los miembros de Padrinos Asturianos en Colombia han enviado un mensaje de pésame por el fallecimiento, el pasado jueves, de Baldomero Murias, hermano de nuestro querido compañero Jesús, que dice así:


“La junta directiva de Padrinos Asturianos de Colombia, la junta sub-sede del Río Amaime y el presidente de honor quieren hacer llegar a usted, don Jesús Murias Fernández, y a toda su familia un especial saludo de condolencia por el fallecimiento reciente de su hermano. Que nuestro buen Dios les acompañe siempre.”

viernes, 23 de abril de 2010

Luto de nuestro compañero Jesús Murias


Ayer falleció en nuestra ciudad, Baldomero Murias Fernández, hermano de nuestro compañero Jesús Murias, impulsor de Padrinos Asturianos desde sus inicios, ex tesorero y miembro de la junta directiva.


El funeral por su eterno descanso tendrá lugar hoy, día 23 de abril, a las 13:30 horas en la capilla del tanatorio de Los Arenales, San Esteban de las Cruces, Oviedo.


A todos sus familiares y en especial a nuestro querido amigo Jesús les enviamos desde este blog las más sinceras condolencias, sentimiento profundo de pésame que también hacemos llegar en nombre de todos los hombres y mujeres que forman parte de la institución.


Descanse en paz.

Cuaderno de viaje (7) – Fundación Formemos en Vereda Cascajal de Cali




La Fundación Formemos, objeto de la visita realizada el lunes día 1 de marzo, está situada en la Vereda Cascajal, un barrio situado al sur de Santiago de Cali, en el punto kilométrico número 5 de la vía que une la capital con el municipio de Puerto Tejada.


La fundación acoge en estos momentos a 17 niñas, de entre 4 y 16 años de edad, que han sido víctimas de malos tratos, 11 de las cuales están apadrinadas por nuestra institución.


Bajo la eficiente coordinación de Mariela Flórez, estas pequeñas disponen de alojamiento en las instalaciones del centro, al que regresan tras asistir a los colegios de la zona.


Durante buena parte de la tarde, el padre Pérez se interesó por los progresos escolares y por el estado emocional de estas menores a cuyo restablecimiento contribuye con eficacia una profesional psicóloga que les presta la necesaria atención terapéutica.


En las dependencias del centro existe un pequeño obrador en el que las internas elaboran unos riquísimos “chicharrones”, una especie de empanadillas de hojaldre rellenas de dulce que venden a los lugareños para cooperar a su sostenimiento, y de cuyo exquisito sabor pueden dar fe los acompañantes del padre Pepe, al tiempo que contemplaban las danzas que las menores bailaban al son de un cubo de plástico, que hizo las veces de improvisado tambor, y se divertían con una inesperada interpretación teatral de una de las pequeñas.


Precisamente, a instancias de padre Pérez, se ha solicitado a la Fundación Telefónica, a través de Funof –Fundación para la Orientación Familiar– que dirige con enorme capacidad la doctora Mónica Giraldo desde la sede central de Cali, la dotación gratuita de equipos informáticos que redundarán en la formación educativa de las menores bajo la supervisión de un monitor especializado.


Ojalá que entre todos lo consigamos.



Más información en el álbum fotográfico “Vereda Cascajal 2010” alojado en:

http://www.facebook.com/pages/Padrinos-Asturianos/164792324101?ref=ts



viernes, 16 de abril de 2010

Cuaderno de viaje (6) – Fundación Manos Providentes en Barrio Alfonso López de Cali


Ubicada en la comuna 7 de Cali y en uno de los barrios más empobrecidos y peligrosos del noroeste de la ciudad, Alfonso López Pumarejo II, la Fundación Manos Providentes fue fundada en 2003 por la Orden Regular de Clérigos conocida más usualmente con el nombre de Teatinos.


Esta comunidad religiosa empezó a trabajar en Cali en el año 2000, a instancias del entonces arzobispo de la archidiócesis, Isaías Duarte Cancino –vilmente asesinado a tiros en 2002-, e inauguró el Colegio San Cayetano en marzo de 2006 con donaciones llegadas de España y Holanda, junto a las aportaciones económicas de diversas empresas colombianas.


Bautizado con el nombre del santo fundador de los padres teatinos y dirigido e impulsado por los sacerdotes españoles Pedro Pascual Nadal y Antonio Domènec Font , el centro formativo acoge a 77 niños apadrinados por nuestra institución, de los que se ocupan con admirable laboriosidad Mirian Lorena Rosero y Darío Castillo entre otros profesionales académicos de acreditada solvencia.


El padre Pérez pasó revista minuciosa a las dependencias del colegio, espléndidas en arquitectura, mobiliario y recursos tecnológicos de última generación aplicados a la enseñanza.


Tras entregar obsequios a los niños apadrinados, nuestro director fundador se interesó por el modus vivendi de los escolares en su entorno familiar y visitó los cobertizos en donde malviven, junto a cientos de desplazados, en un sórdido, paupérrimo y peligrosísimo enclave conocido también como el jarillón del río Cauca.


Buena prueba de la conflictividad de la zona son los cotidianos tiroteos entre pandillas rivales –jóvenes de 15 años en adelante– o contra la policía, que dejan cada año un rosario de muertos y heridos por impacto de bala.


Minutos después de dar por terminada la visita y de retorno al colegio, donde tuvo lugar un almuerzo ofrecido por la dirección del centro educativo, se oyeron varios disparos procedentes del arrabal a consecuencia de un enfrentamiento entre pandilleros y un agente de la autoridad si bien, como pudimos saber más tarde, ese jueves, 25 de marzo, no se registraron víctimas.


Menos mal.



Más información en el álbum fotográfico “Barrio A. López 2010” alojado en:

http://www.facebook.com/pages/Padrinos-Asturianos/164792324101?ref=ts



domingo, 4 de abril de 2010

Cuaderno de viaje (5) – Colegio Juan Pablo II en Siloé

En la comuna 20 de Cali encontramos el barrio de Siloé, uno de los más antiguos y deprimidos de la capital valluna.


Conocido también como el “Pesebre de Cali”, si la ciudad es la sucursal del cielo, el arrabal, encaramado en la cumbre de la zona occidental de la urbe, lo acaricia de lleno con los vértices de los tejados.


En el Colegio Juan Pablo II, ubicado en la parte baja del barrio y fundado en 1999 por el arzobispo de Cali, Isaías Duarte Cancinoque cayó asesinado en 2002-, la institución apadrina a 184 niños de los más de mil que reciben formación educativa en el centro.


La religiosa Mélida Rangel da la bienvenida al padre Pérez, quien entrega regalos a los niños y reparte consejos entre los alumnos, especialmente a uno invidente al que Padrinos Asturianos presta ayuda desde hace años.


La hermana Rangel –junto con Reinerio Correa, profesor que se encarga del seguimiento de los becados- remarca con agrado la importancia que nuestra institución tiene para el futuro de los jóvenes de Siloé y recuerda que, 3 estudiantes apadrinados, ya han acabado sus ciclo formativo en el colegio e iniciado cursos de grado superior en la Universidad Antonio Nariño.


Poco después, el gesto de la monja se turba bajo la lona de la caja de una destartalada camioneta de alquiler que nos transporta carretera arriba hasta las viviendas de algunos colegiales, mientras musita, muy asustada, una oración de piedad a la Virgen María.


La visita transcurre con normalidad y la barriada, poblada mayoritariamente por gente humilde y luchadora, no se inmuta lo más mínimo ante la presencia del infrecuente cortejo.


El pantalón remendado de Víctor Hugo, un buen estudiante que se pasa el recreo pateando un balón hacia la portería o lanzándolo contra la canasta, evoca el recuerdo de muchos escolares españoles de los años sesenta, con sus pantalones zurcidos a la altura de las rodillas o con grandes remiendos de cuero en mitad de las perneras.


Si muchos niños de este lado del atlántico lograron salir adelante, ¿por qué no van a poder realizar sus sueños estos astutos chiquillos colombianos?


Ese es nuestro compromiso y nuestro reto.


Y en ello estamos.




Más información en el álbum fotográfico “Siloé 2010” alojado en:

http://www.facebook.com/pages/Padrinos-Asturianos/164792324101?ref=ts



viernes, 2 de abril de 2010

Cuaderno de viaje (4) – Centro de Formación Integral Providencia en El Cerrito



La mañana del 23 de febrero, la expedición pone rumbo al corregimiento de El Placer en el municipio de El Cerrito, situado a 47 kilómetros de Cali, en dirección nordeste y adonde se llega dejando a la derecha la populosa ciudad de Palmira, en la ribera oriental del río Cauca.


A las 9 en punto de la mañana Guillermo Barney y Clemencia Gómez Barreiro, dos personas claves en la organización de Padrinos Asturianos –junto a Francisco G. Barreiro y Lucía N. de García–, nos abren las puertas del Centro Asistencial Oviedo, construido en 2004 por iniciativa del padre Pérez y hecho realidad gracias a la aportación económica del ayuntamiento de la capital de Asturias, un equipamiento que cuenta con consultorio médico y odontológico gratuito, guardería infantil, talleres-escuela de culinaria y de corte y confección, biblioteca, zona recreativa para niños y sala de reuniones.


Tras unas breves palabras introductorias de nuestro director fundador y la entrega de regalos a los niños que la institución tiene apadrinados en la zona, 49 en la actualidad, el grupo se traslada a un desdichado arrabal, que acoge a 200 familias desplazadas, la mayoría sin trabajo estable, y todos con escasísimos recursos, situado en terrenos de la empresa del sector azucarero Ingenio Manuelita, en la ladera del río Amaime, conocido como Techo Azul.


El nombre del poblado se debe a que las capotas de las chabolas más ruinosas, pues ni a techumbres ni a tejados llegan en muchos casos, son de plástico de color azulón, apenas remachado sobre débiles paredes de madera de guadua, una especie de bambú típicamente colombiano.


Quienes han corrido mejor suerte o han tenido la fortuna de ganarse honradamente unos pesos en faenas eventuales, pueden llegar a disponer de un chamizo con cubierta de uralita y muretes de ladrillo sin revocar.


En uno de estos espacios desoladores, tendido en el suelo, yace un niño escayolado desde los tobillos hasta el pecho que pone el corazón de los visitantes en un puño.


Una madre arrasada por la dolencia de su hijo, pues se trata de una osteogénesis imperfecta, popularmente llamada enfermedad de los “huesos de cristal”, clama por unos medicamentos que ella no le puede pagar.


¿No habrá bajo la capa del firmamento un laboratorio farmacéutico solidario, siquiera uno, que contribuya gratuitamente con las medicinas que este niño de seis años necesita para no quebrarse el esqueleto al menor tropiezo?


La miseria en cueros vivos que se respira en Techo Azul difiere de la vida humilde, pero muy decorosa, que se puede llevar en el Barrio Oviedo o en el Barrio El Carmen, ideados e impulsados por el padre Pérez para dar cobijo a los obreros más necesitados de Ingenio Providencia, que cuentan con viviendas de planta baja y huerto.


Quien fuera capellán y director de recursos humanos del consorcio azucarero durante 25 años lanza una pregunta a quemarropa mientras visitamos sus barriadas, impresionado todavía por lo que habían visto sus ojos un cuarto de hora antes: ¿Qué podemos hacer por toda esta gente de Techo Azul? ¿Cómo podríamos ayudarla a salir de tan inmunda pobreza?


Una leve sonrisa de indisimulada satisfacción asoma, por fin, al rostro del padre Pérez cuando llegamos al Centro de Formación Integral Providencia, un grandioso complejo que alberga a 4.000 alumnos cada curso académico y que él levantó de la nada en 1965.


En ésa su mayor empresa de desarrollo social y humano, erigida sobre terrenos cedidos por la azucarera gracias al sudor voluntario de cientos de trabajadores durante incontables fines de semana, cortadores de caña en su inmensa mayoría que querían un futuro mejor para sus hijos, se sigue impartiendo a día de hoy formación para la producción y se sigue realizando producción para la formación.


No en vano, la división de confecciones, que recorremos antes de almorzar con representantes de la entidad, trabajan a pleno rendimiento y las ventas anuales suponen el 60% de la financiación de todo el centro educativo.


Numerosos aularios, talleres de formación profesional, salón de actos, comedores, recintos polideportivos, piscina, campo de fútbol… se despliegan sobre 8 hectáreas de superficie, equivalentes a 10 terrenos de juego como el del Fútbol Club Barcelona, por lo que disfruta, al mismo tiempo, de abundantes espacios verdes y amplios viales.


Bajo la dirección de la doctora Dora Lucía Díaz Chacón, el Ministerio de Educación Nacional le otorgó en 2008 el premio al mejor Ceres (Centros Regionales de Educación Superior) de entre los 103 que existen en Colombia, un programa formativo implantado en las citadas instalaciones a través de la Universidad Autónoma de Occidente desde 2006.


Ya en 1982 el Gobierno de Colombia había condecorado al padre Pérez con la Medalla Cívica Camilo Torres, un galardón civil del máximo prestigio creado para reconocer y enaltecer al forjador de una obra educativa tan admirable.


De chapó, padre Pepe.


Y para descubrirse.



Más información en el álbum fotográfico “El Cerrito 2010” alojado en:

http://www.facebook.com/pages/Padrinos-Asturianos/164792324101?ref=ts